👩🚀 La tecnología como impulsora del arte
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La tecnología como impulsora del arte
Por: Abraham
Cuando pensamos en arte y tecnología parece que son dos cosas que viven en partes del mundo separadas, en realidad cuesta pensar un par de segundos en la convergencia entre la tecnología y el arte para entender cómo estas dos áreas están tan profundamente entrelazadas. La tecnología ha evolucionado a tal velocidad gracias a la introducción del internet y la evolución del microchip durante las últimas décadas que actualmente puede que estemos un poco separadxs de cómo el arte se ha mantenido al día con esta evolución. Hoy en día, la tecnología ha llevado al arte a una nueva convergencia con ejemplos clarísimos como la adopción masiva de la fotografía gracias a la evolución de la cámara móvil, el desarrollo del cine moderno con efectos especiales que construyen historias, las esculturas modeladas en 3d, la arquitectura en el metaverso, la capacidad de tener un estudio de grabación con tan solo una computadora, un micrófono y un par de instrumentos, y muchas otras cosas más.
La tecnología presenta nuevas herramientas para el arte y cuando una artista las toma y crea algo nuevo al mundo generalmente le parece raro y hasta insultante. Hace un par de meses leí este hilo de una de mis cuentas favoritas (@culturaltutor) y hoy te voy a contar cómo una de mis corrientes artísticas favoritas nació gracias al impulso de una pequeña comunidad de gente innovando y cuestionando la norma, cómo la tecnología fue FUNDAMENTAL para su desarrollo y un analizaré algunas similitudes con algunas nuevas corrientes artísticas actuales en la web3; te contaré sobre el impresionismo.
Como cuenta esté gran hilo, en la década de 1860 cuatro jóvenes pintores coincidieron en la Academia de Bellas Artes de Francia, sus nombres eran Claude Monet, Pierre-Auguste Renoir, Alfred Sisley y Frédéric Bazille. Los cuatro encontraron que el abordaje de la pintura que se tenía en la Academia era anticuado, irreal y poco inspirador. El estilo de la academia les parecía parecía artificial al tener una iluminación cuidadosamente orquestada y con una manera forzada de pintar al imitar el Renacimiento. En ese tiempo la pintura se hacía en un estudio, algo así:
Cuando coincidieron en la Academia, Monet tenía alrededor de 22 años, Renoir 21, Sisley 23 y Bazille 19 años. Los cuatro jóvenes artistas estaban ansiosos por explorar nuevas técnicas y enfoques en la pintura lo que les llevó a compartir intereses poco convencionales y en nuevas formas de realismo que desafiaban los estándares de la pintura académica tradicional. Ellos querían seguir su curiosidad lo que les llevó a ser disidentes del arte de sus tiempos, en retrospectiva podemos ver que tenían en común los siguientes elementos fundamentales que les unió:
Estaban hartos del estudio y les interesaba la pintura al aire libre, la captura de la luz natural y el movimiento real de las cosas. La Academia se centraba en la representación idealizada y simbólica de la realidad. Estos jóvenes buscaban representar el mundo tal como lo veían, sin tratar de idealizarlo o embellecerlo.
Desafiaron la técnica de la pintura académica basada en la creación de capas de pintura densas y elaboradas para crear obras de arte detalladas y realistas. En cambio, ellos utilizaban pinceladas sueltas y vibrantes que creaban una sensación de movimiento y luz que de forma constante se mezclaban ópticamente en el ojo del espectador. No pintaban la realidad como una cámara podría capturarla, sino como el ojo la percibe de un momento a otro con todo su movimiento, luz cambiante, breves vistazos, niebla y desenfoque.
Se alejaron de los temas clásicos y religiosos que eran la norma en la Academia y comenzaron a representar escenas de la vida cotidiana, los paisajes urbanos y los espacios naturales. En lugar de buscar la perfección y la idealización en sus obras, buscaban capturar la atmósfera y la luz de su entorno, lo que resultaba en obras de arte que eran mucho más inmediatas y cercanas a la vida real.
Estos factores los llevó a tomar sus caballetes, óleos y pinturas y tener que moverse físicamente para pintar al aire libre ("en plein air" en francés), y encontraron en el artista mayor Edouard Manet una persona que les impulsaba a tratar esto. Al poco tiempo se unieron Paul Cézanne y Camille Pissarro y el impresionismo comenzó a gestarse. Aquí queda claro uno de los primeros elementos para la concepción de cualquier movimiento, la creación de una comunidad. Este grupo de talentosos artistas muchas veces salían juntos al campo o a la ciudad para pintar al aire libre compartiendo ideas y técnicas. Solo se necesita un pequeño grupo unido de gente inspirada, talentosa y con un objetivo en común para revolucionar al mundo.
Este grupo de artistas compartía una comunidad e ideales, aquí es donde entra la tecnología que fue un factor fundamental para terminar de construir este movimiento innovador. Uno de los elementos técnicos de su pintura que fue impulsado por la evolución tecnológica en su tiempo, fue la sustitución de azul en lugar de negro para pintar sombras. La leyenda cuenta que Renoir dijo "una mañana, uno de nosotros se quedó sin negro, y fue el nacimiento del Impresionismo". En la Academia se pintaban las sombras con color negro y los impresionistas cambiaron esto de forma fortuita según la leyenda, este sutil cambio hizo una enorme diferencia en sus pinturas. En el mundo real bajo la luz natural las sombras negras son muy poco comunes, casi todas las sombras están en una escala de azules al ser el color del cielo. Esto se vió cada vez más reflejado en las pinturas impresionistas.
El uso de tonos azules tan vibrantes se dió gracias a que a mediados del siglo XIX, mientras iniciaba el impresionismo, llegó al mercado parisino un nuevo pigmento llamado azul cobalto. Este es un pigmento inorgánico que se obtiene a partir de la mezcla de óxido de aluminio, óxido de cobalto y dióxido de silicio (tecnología). Fue creado en el siglo XIX por el químico francés Louis Jacques Thénard, tenía un suministro constante en París a un precio de entre 3 y 5 dólares por onza, sus propiedades permitían que estuviera al aire libre sin decoloración ni oxidación, y tenía grandes atributos estéticos por su brillantez y versatilidad.
Antes de la invención de este pigmento lxs artistas tenían los siguientes pigmentos que no eran ideales para los impresionistas dado su alto costo o por características químicas de las pinturas:
Azurita: es un pigmento mineral azul que se encuentra en la naturaleza, es muy inestable, se oscurece y se vuelve verdoso con el tiempo. Fue utilizado por los antiguos egipcios y se siguió utilizando en la Edad Media y el Renacimiento. También es bastante caro, ya que es difícil de extraer y procesar. En el siglo XIX, el precio de la azurita oscilaba entre 1 y 2 dólares por onza.
Lapislázuli: es otro pigmento mineral azul que se extrae de una piedra semipreciosa del mismo nombre. El lapislázuli fue utilizado por los antiguos egipcios, griegos y romanos, y fue muy apreciado por su intensidad y su tonalidad. Este mineral es muy caro debido a que se extrae en pocas regiones del mundo, como en Afganistán y Chile. En el siglo XIX, su precio oscilaba entre 15 y 20 dólares por onza.
Azul ultramar: Es un pigmento sintético que se obtiene a partir del lapislázuli. Fue desarrollado en el siglo XIII y se utilizó ampliamente en el Renacimiento. El azul ultramar es menos caro que el lapislázuli pero su precio y suministro era muy variable dado que dependía del mineral para su producción. En el siglo XIX, el precio del azul ultramar oscilaba entre 3 y 5 dólares por onza.
Otro factor tecnológico que hizo posible al impresionismo fueron los tubos de pintura portátiles que aparecieron a mediados del siglo XIX y permitieron a lxs artistas llevar sus colores al aire libre para trabajar más cómodamente en cualquier lugar. Esto hizo posible que los impresionistas pudieran pintar en cualquier momento y en cualquier lugar, lo que contribuyó a su estilo suelto y espontáneo. Actualmente tenemos la imagen del pintor impresionista como alguien que va caminando por el campo con una mochila donde lleva sus herramientas, en cualquier momento pone un banco e inicia a pintar. Esto no es una imagen alejada de la realidad y fue posible gracias a los tubos de pintura; suena como una evolución tecnológica muy simple y en realidad fue algo que llevó a una explosión artística brutal.
Antes de la invención de los tubos de pintura portátiles en la década de 1840, lxs artistas solían comprar algo que se conocía como "pan de pintura" o "pastilla de pintura". Estos eran pequeños bloques o discos de pintura seca que se mezclaban con un aglutinante (como aceite de linaza) y agua antes de ser aplicados al lienzo o al papel. Las pastillas de pintura se vendían en una variedad de tamaños y colores y su precio era relativamente alto en comparación con los tubos de pintura que surgieron más tarde. Durante la década de 1830 un pan de pintura de color ultramar costaba alrededor de 10 francos en París, lo que era una cantidad considerable de dinero para la época. En comparación, un tubo de pintura de ultramar del mismo tamaño en la década de 1860 costaba alrededor de 2 francos, lo que lo hacía mucho más económico y accesible para lxs artistas. Además los tubos de pintura portátiles en la década de 1840 le permitieron a lxs artistas tener más control sobre la cantidad de pintura que usaban y la capacidad de transportar la pintura más fácilmente. Sin esta innovación tecnológica el impresionismo no hubiera ocurrido de la misma forma.
A todo esto, ¿qué tienen que ver el impresionismo y la web3? Los impresionistas se alejaron de la representación idealizada y simbólica de la realidad para buscar una representación más cercana a la vida cotidiana; lxs artistas de la web3 están utilizando la tecnología para crear experiencias artísticas más inmersivas e interactivas que conectan al espectador con la obra de una manera más profunda. La accesibilidad a herramientas es un factor determinante en la creación de este nuevo movimiento artístico. Así como los tubos de pintura portátiles y el nuevo pigmento azul cobalto permitieron a lxs artistas impresionistas salir al aire libre y capturar la luz y el movimiento de la vida real, hoy en día los NFTs y la monetización por medio de criptomonedas le está permitiendo a lxs artistas expandir sus límites creativos y poder tener una audiencia mucho más grande para comercializar su arte.
Lxs artistas de la web3 están desafiando las normas establecidas del arte y creando nuevas formas de expresión en un sentido similar al que lo hicieron los impresionistas. La web3 está impulsando la creación de nuevas comunidades en línea donde lxs artistas pueden colaborar y compartir ideas en un ambiente de apoyo y creatividad. Igual que el pequeño grupo de Monet y compañía, solo que potenciado por el internet y el blockchain. En lugar de seguir las convenciones tradicionales del arte, lxs artistas de la web3 están explorando nuevas formas de interactuar con el público y de crear obras de arte que sean más accesibles y participativas.
En ambos movimientos artísticos la tecnología ha tenido un impacto para hacer las expresiones artísticas más accesibles, ha incrementado los límites de lo que la gente puede generar y esto ha expandido el mercado que el arte puede capturar. Estoy muy entusiasmado de pensar en cómo la tecnología continúa impulsando la evolución del arte y cómo lxs artistas de la web3 están liderando esta nueva era de la creatividad. La accesibilidad de las herramientas y las nuevas formas de distribución del arte han abierto un mundo de oportunidades para artistas de todas partes, y estoy emocionado de ver hacia dónde nos llevará el futuro. Al igual que los impresionistas desafiaron las normas y crearon un movimiento artístico innovador, lxs artistas de la web3 están liderando el camino hacia un nuevo futuro creativo, donde la tecnología y el arte se funden en nuevas y emocionantes formas. Sin duda, la tecnología seguirá teniendo un impacto significativo en la forma en que experimentamos y creamos arte, y estoy emocionado de ver cómo esto continúa evolucionando en los próximos años.
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